miércoles, 2 de mayo de 2012

Psicopedagogía y su valoración


¿Cuál es la contribución de la Aplicación y Evaluación de Pruebas Psicopedagógicas, para la lograr la disminución de la brecha del conocimiento, entre pares de educandos en I y II Ciclo, de la educación formal costarricense?


Elaborado por: MPsp. Evelyn Fuentes Mora

A pesar de que Costa Rica es uno de los países con menor tasa de analfabetismo en América Latina, se detecta a través de investigaciones, una gran ola de deserción del estudiantado, que se agrava aún más al ir escalonando los niveles educativos.

Los estudiantes se enfrentan a un sistema educativo que limita la adquisición de competencias curriculares de acuerdo a las potencialidades y habilidades que individualmente los escolares han ido adquirido con el tiempo. Esto debido a  la poca importancia que se le da a la valoración pedagógica, la cual arroja importantes resultados sobre el trabajo que requiere cada ser único e irrepetible.

La finalidad de utilizar instrumentos psicopedagógicos en la valoración de niños y niñas escolares, es dotar al profesional, que trabaja con el estudiante, de procedimientos de intervención en la metodología que se aplica, para crear andamios que permitan a la persona realizar una tarea, a pesar de las destrezas que aún le falta por adquirir y que con apoyo puede construir.

El aplicar y valorar con pruebas psicopedagógicas permite no solo la toma de decisiones relativas a la escolarización como organizar, adaptar y determinar los recursos específicos que requiera, sino que como ser bio-psico-social, permita abarcar tanto las posibles dificultades de aprendizaje como además sus capacidades cognitivas, físicas, conductuales, emocionales y hasta sociales que pueda presentar.

En la etapa escolar, específicamente en el I y II Ciclo  la contribución que logra la aplicación y valoración de pruebas psicopedagógicas permite no sólo abarcar una planificación más acorde a las potencialidades del estudiante sino también procura acercar a la familia con la Institución educativa, pues a la luz de los resultados es indispensable que se consolide un equipo que pueda participar  en los planes de intervención que se diseñan para el estudiante que lo requiera, pues este campo de acción no puede desprenderse de lo que es un trabajo integral.

En la valoración de los niños escolares con pruebas psicopedagógicas, se  pretende ante todo construir andamios que le permitan a cada cual utilizar diferentes caminos de acuerdo a sus capacidades, con el único fin de lograr en todos las mismas competencias que se establecen en un periodo. Lo importante para reducir la brecha de conocimiento entre pares es respetar el ritmo y estilo de aprendizaje, además de las características propias que se puede descubrir cuando se investiga a través de la utilización de pruebas tanto cualitativas como cuantitativas. 

De la mano con las pruebas que se determinen utilizar al estudiante que lo requiere, es importante que se puedan aplicar técnicas que recolecten más información y que permita tener una visión clara de la posible condición que puede afectar el aprendizaje de la persona como lo es la observación. Esta técnica debe ser constante, permanente y consecuente, pues es sin duda, una herramienta aliada de los profesionales dedicados al área de educación y las ciencias sociales, entre otros, pues con ello la valoración se enriquece tanto en el ámbito educativo, recreativo y familiar.

Para lograr que todos los estudiantes alcancen las competencias básicas de cada nivel, es fundamental que la educación pueda darse el tiempo de detenerse a realizar una evaluación fundamentada en una serie de pruebas, para lograr una educación primaria potenciadora de conocimiento y no una fuente de conflictos que debe ver como soluciona el estudiantado centrando el problema en la persona y no en el sistema.

Y es que en el ambiente escolar, el profesional se limita a realizar una evaluación en la lingüística y en la matemática, pero no se detiene a valorar las habilidades básicas para adquirir dichas competencias académicas, por lo tanto aunque se detectan dificultades generales en cada una de esas áreas no se trabaja en la dificultad específica que proviene de una habilidad no adquirida o que necesita de un refuerzo mucho mayor. 

Si se aplicaran pruebas psicopedagógicas se tendría una visión integral con resultados claros para la toma de decisiones. Si al fin se trabajara en equipo multidisciplinario, que gran aporte tendríamos en la educación y esa brecha de la que se habla se disminuiría.

Es importante entender que la importancia de disminuir la brecha de conocimiento entre los y las estudiantes escolares es que, a través del análisis de las pruebas que se aplican, permitan una intervención en la planificación y un desarrollo óptimo en los procesos educativos, tanto de forma académica como social, para lograr una persona competente que le permita adaptarse con habilidades de autonomía y confianza en la sociedad, a partir de herramientas y recursos logrados desde la escuela y el hogar, para que la intervención sea todo un éxito.